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Gastón Serrate: Un amigo de la casa y su odisea en San Juan

Se hizo famoso a través de las historias de su “mercedito”. Un Mercedes Benz 1114 color rojo de película, que es el protagonista por excelencia de su cuenta de Instagram @gastonserrate.

Juntos compartimos el test drive de los Actros de Mercedes Benz Camiones y Buses en el Autódromo “Oscar y Juan Gálvez”, “estuvo todo muy bueno, hemos podido comprobar el confort y la excelencia de Mercedes Benz, era el único camionero en el evento” compartió a través de RADIO El BORNE, en diálogo con Vale Trongé, “probé todos los camiones, no me que quedé con las ganas” ríe, y nosotros tampoco, ya que hizo las vueltas con nuestra directora comercial, Eliana Duhart, “con Eli compartimos la vuelta en un bitren y estuvo muy bueno, se nota que tiene muñeca para el manejo”, elogió.

La charla desemboca de manera directa en su “odisea a San Juan”, una serie de sucesos desgraciados como la película, en la que cosechó anécdotas para su vejez, y se volvió con una parva de amigos solidarios.

Estuvo 15 días tirado en San Luis, “se viralizó mi mala suerte” ríe, “la gente me dio una mano increíble, encontré un montón de amigos, fue una experiencia que me dio una gran satisfacción desde lo personal”.

“Pasé San Luis, en la ruta N° 147, advertido de que era complicada, sin señal, y si, se me rompió el camión a pocos kilómetros de San Luis Capital, a 30 kilómetros estaba San Gerónimo, ahí me llevaron al pueblo porque no tenía señal para nada. Se me había soltado la polea, con el camión enganchado me fui para el pueblo.

 Al tercer día, vino un mecánico que me lo arregló, al cuarto día salí de nuevo, hice 70 kilómetros y se me corta el cigüeñal, ahí tuve que llamar a mi viejo para que se venga con el tractor solo, un sábado hasta el domingo en la nada misma, en la ruta. Vino un amigo Jorge, que me vio por las redes, se hizo 70 kilómetros para traer comida, cuando en eso, llega mi viejo con el Volkswagen 220, recién salido del taller, enganchó el semi, y volvimos a San Gerónimo.

¡Hizo dos kilómetros y se le fundió el camión a él! De no creer… Jorge me dice que tenía un camión y que me lo prestaba; y acepté, estaba desesperado porque el lunes tenía que estar en San Juan con el contenedor, que llevaba una máquina agropecuaria. Hice el viaje con el camión de Jorge, volví con el MB 1526, un misil, me quedé unos días más a ver si podía arreglar el mercedito, pero era complicado, así que nos volvimos con mi viejo a Buenos Aires, para después volver los dos otra vez a buscarlo, fueron 15 días de no parar, una locura todo”.

Jorge un tipazo, son cosas que te pasan que no te olvidas, como alguien que te presta una lapicera, él me prestó su camión. Eric otro gran tipo, Pablo Chaveta un mendocino que hizo kilómetros para traer un reloj de presión, fueron muchos los que me dieron una mano para poder salir adelante.

Por momentos perdí la cabeza, cuando se me rompió la primera vez, pegué un grito bárbaro y le pegué una trompada a la guantera, después fue pasando, y tomé las cosas con tranquilidad, primero era el planeta sobre mi cabeza y después fue pasando todo.

Por suerte hoy lo puedo contar como anécdota, por momentos pensaba ¿algo más me va a pasar? la gente seguía las historias de Instagram y por eso me creen, porque tantas cosas fueron, tantas desgracias todas juntas. El camión estaba re bien, acababa de hacerle la bomba inyectora, todo perfecto, y se cortó el cigüeñal.

Hoy me río, rescato la calidez de la gente de San Luis, Mendoza y San Juan, incontable la cantidad de personas que se ofrecieron a venir a ayudarme. un amigo compartió una historia cuando me quedé varado, yo estaba sin señal y se había armado toda una red de ayuda, eso es increíble”.

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