Según el informe de la CIARA y el CEC, la baja en el flujo de camiones de maíz y soja refleja una estrategia conservadora de los productores ante la variabilidad de precios
El flujo de camiones de soja y maíz hacia los principales puertos de Argentina mostró una disminución en octubre, marcando un retroceso en comparación con los meses anteriores. Durante el mes, ingresaron aproximadamente 53.800 camiones de soja, una cifra menor al rango de 60.000 a 65.000 observado en los tres meses previos. Así surge del Monitor Agroindustrial publicado por la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
En términos de volumen, la soja descargada en los puertos alcanzó las 1,72 millones de toneladas, lo que representa una baja respecto a septiembre, cuando se registraron 1,98 millones de toneladas, y a meses como agosto y julio, en los que se superaron las 1,9 millones de toneladas.
El descenso en la entrada de camiones de soja responde en gran medida a las decisiones de los productores, que han optado por gestionar sus inventarios de manera conservadora, limitando las entregas directas en los puertos.
Este comportamiento se alinea con una estrategia de comercialización que busca obtener un mejor precio en el mercado futuro, debido a la variabilidad que han tenido las cotizaciones internacionales y a factores internos que afectan los costos de producción. Esta tendencia, que muestra una disminución en el ritmo de transporte, influye directamente en la cadena logística y en la operatividad de los puertos de Argentina, donde el volumen de camiones se convierte en un indicador clave para el sector exportador de granos.
El flujo de maíz también registró una disminución importante en su ingreso durante octubre. En este mes, la cantidad de camiones cargados con maíz llegó a aproximadamente 30.400, frente a los 36.500 camiones que ingresaron en septiembre y los 43.800 de agosto.
Esta tendencia bajista en el movimiento de maíz hacia los puertos se traduce en una caída en el volumen de maíz descargado, que se ubicó en 972.000 toneladas en octubre, comparado con los 1,17 millones de toneladas del mes anterior y los 1,4 millones registrados en agosto. La reducción en la entrada de camiones de maíz obedece a una menor oferta de este grano en el mercado, ya que algunos productores han preferido vender más soja, generando un cambio en el equilibrio de las entregas.
Por otro lado, el flujo de camiones de trigo mostró una tendencia opuesta, con un aumento significativo en el mes de octubre. En comparación con los meses anteriores, el trigo registró una entrada de 5.600 camiones, frente a los 4.000 camiones ingresados en septiembre. Este incremento se atribuye al avance de la cosecha en las provincias del norte, impulsado por la necesidad de liquidez de los productores, quienes buscan aprovechar la demanda del mercado.
En términos de volumen, la entrada de trigo a los puertos fue de 147.000 toneladas, marcando un repunte en comparación con las 129.000 toneladas del mes previo. Este incremento en la descarga de camiones de trigo genera un flujo positivo para la logística nacional, que se ajusta a las variaciones estacionales y a los cambios en la oferta disponible de cada cultivo.
Exportaciones de granos: cómo evolucionaron en octubre
Durante octubre de 2024, las exportaciones del sector agroindustrial argentino registraron ingresos por 2.553 millones de dólares. Esta cifra representa un aumento del 243% respecto al mismo mes en 2023 y un incremento del 2,9% en comparación con septiembre del mismo año, posicionando a octubre como el mejor mes registrado en esta industria desde 2002.
El notable ingreso de divisas responde a una combinación de factores, entre ellos, el mayor ritmo de ventas de granos por parte de los productores, un alto nivel de molienda de soja y una estrategia agresiva de embarques de harina y aceite de soja, que actúan como pilares fundamentales en el esquema exportador del país.En octubre, la cantidad de camiones cargados con maíz llegó a aproximadamente 30.400, frente a los 36.500 camiones que ingresaron en septiembre y los 43.800 de agosto (Foto: Shutterstock)
El complejo oleaginoso-cerealero es uno de los sectores más estratégicos para la economía argentina, no solo por su rol en el ingreso de divisas, sino también por su impacto en el empleo y en el desarrollo de infraestructura logística. En 2023, este sector representó el 50,1% de las exportaciones totales del país.
La harina de soja, que constituye el 12% del total exportado, es el principal producto de exportación, seguido por el maíz con un 11% y el aceite de soja con un 6,9%. La relevancia de la soja y sus derivados en la economía es innegable, aunque la industria enfrenta retos importantes debido a una capacidad ociosa cercana al 70%, lo que refleja los desafíos actuales de un sector que debe lidiar con la volatilidad de precios y el cumplimiento de estándares internacionales.
La información sobre el flujo de camiones y las cifras de exportación refleja las dinámicas de mercado y las decisiones de los productores, que impactan tanto en la logística como en la disponibilidad de productos para la exportación. Esta interacción entre producción, precios y logística marca el ritmo de las exportaciones de granos, un aspecto central para la economía argentina.