Borneros

Transporte de cargas: la campaña 2024/25 cerraría con un crecimiento del 6% en volumen

Un balance logístico histórico para el agro argentino

El transporte de cargas de la campaña agrícola 2024/25 se encamina a cerrar con un crecimiento del 6%, alcanzando 94,6 millones de toneladas movilizadas. Según estimaciones de la GEA – Guía Estratégica para el Agro, este volumen se ubicaría como el tercer mayor de la historia para la logística de granos en Argentina.

El impulso provino, entre otros factores, del decreto 682/25, que redujo de manera temporaria las retenciones y generó un incremento del volumen comercializado, fortaleciendo la actividad logística y el registro de embarques.

El camión: protagonista de la logística

Como cada año, el camión concentra el 80% del transporte de granos en el país. Para esta campaña, se proyecta que más de 72,5 Mt de granos sean trasladadas por camión, lo que equivale a 2,5 millones de viajes anuales, de los cuales cerca de dos millones tendrán como destino final los puertos del Gran Rosario y Up River.

Este crecimiento representa un aumento superior al 8% respecto a la campaña pasada, consolidando al transporte carretero como pilar de la logística agroindustrial.

Ferrocarriles y barcazas: aportes y caídas

El transporte ferroviario alcanzará unas 15,4 Mt de granos, equivalentes a 328.000 vagones, lo que implica un crecimiento cercano al 7% interanual.

En contraste, el transporte fluvial por barcazas registrará una caída del 16%, con 6,5 millones de toneladas, de las cuales unas 6 Mt corresponden a la importación temporaria de soja para su posterior industrialización y reexportación desde el Up River. En cuanto al cabotaje doméstico, se proyecta un leve aumento del 4%, con alrededor de 4.300 viajes en barcazas.

La logística agroindustrial en 2025: un sector en expansión

Entre enero y julio de 2025, los embarques agroindustriales superaron los 56 millones de toneladas, marcando una suba del 3,6% interanual. El 75% de esas cargas partieron de los puertos del Up River, en línea con los promedios históricos.

En este período, el transporte por camión creció un 8%, mientras que el uso del tren y de las barcazas retrocedió un 7% y 14% respectivamente, debido a menores movimientos en el norte argentino y a la baja de importaciones temporarias de soja.